Actualmente, los habitantes de la región del Adriático están preocupados por una gran cantidad de desafíos que enfrentan: mejorar la biodiversidad y sus medios de vida, incrementar los rendimientos forestales, minimizar los impactos del ecoturismo y los efectos del cambio climático, incrementar el uso de energía renovable, y obtener materiales ecológicos para la construcción.
La cooperación en la zona del Adriático es importante asimismo debido a la intención de varios países de incrementar la estabilidad y crear una integración más sólida entre ellos y el resto de Europa, así como apoyar el crecimiento económico y el desarrollo sostenible en una región que vivió un largo período de conflictos hace sólo 20 años.
El proyecto del Bosque Modelo del Adriático pretende implementar el concepto de Bosque Modelo en varios países del sudeste de Europa. Croacia ya tiene un Bosque Modelo en desarrollo, el Bosque Modelo del Río Mirna en la región de Istria.
El Bosque Modelo del Río Mirna fue creado por el Instituto de Investigación Forestal de Croacia, que percibió en el concepto de Bosque Modelo un enfoque que combina la reflexión y el diálogo inclusivos con acciones concertadas y concretas, y brinda un enlace multifacético entre la creación de políticas nacionales e internacionales y las operaciones en el terreno.
El Instituto de Investigación Forestal de Croacia y la Secretaría de la Red Mediterránea de Bosques Modelo, junto con otros socios, han tomado la iniciativa para desarrollar el nuevo Bosque Modelo en Dalmacia. Están coordinando un proceso que no solamente es testigo del desarrollo del segundo Bosque Modelo croata sino que constituye una serie de eventos de transferencia de conocimiento que permitirán a los socios regionales obtener experiencia práctica y aplicar los mejores métodos para comenzar a crear sus propios Bosques Modelo. Los socios incluyen nueve organizaciones públicas de Albania, Bosnia, Herzegovina, Croacia, Grecia, Italia, Montenegro y Serbia.
El Bosque Modelo es una nueva herramienta de gobernabilidad que los socios reconocen como la manera de promover la gestión integrada del paisaje en la región sudeste de Europa.